La temporada 2007/08 está a punto de finalizar y ya va siendo hora de ensalzar las hazañas del Villarreal este curso. Seguramente a principio de temporada pocos apostaban por el reciente subcampeonato de los de Pellegrini. Y porque se han encontrado con una de las mejores versiones ligueras del Real Madrid, que sino quién sabe si hubiesen luchado por la liga.
Lo que más me ha gustado de los amarillos ha sido su entereza en momentos de presión. Nunca han bajado el nivel. Ni cuando eran la alternativa a los blancos para ganar la liga ni cuando se veía la posibilidad de entrar directamente en Champions. Nunca han dejado de ganar.
Una plantilla con nombres como Diego López, Cygan, Capdevila, Tomasson, Rossi, Pires, Cazorla o Nihat podría pensarse que su mayor techo sería clasificarse para la UEFA pero ellos han demostrado que en el fútbol valen mucho más los hombres que los nombres. Eso sí, el año que viene tienen su reto más difícil para que se les empiece a tomar más en serio aún: ganar un título.
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