Hace tiempo que no hago ninguna crónica del Real Madrid y hoy, que dispongo de un ratillo, la haré del partido que nos acaba de enfrentar al Bilbao.
Típico partido de los blancos últimamente, o sea, que pudimos perder o empatar pero que al final ganamos. Le falta al equipo ese detalle tan pequeño como importante que es el de echarle el cerrojo a los partidos. Y eso que la cosa empezó con 2-0 que hacían pensar que la cosa se iba a solventar con rapidez. Pero nada más lejos de la realidad. Primero una jugada extraña que Etxeberría definió demasiado fácil (Casillas está en muy baja forma) y luego un penalti raro nos pusieron con empate en el marcador al descanso.
En la segunda apareció Higuaín para desequilibrar la balanza a nuestro favor y a partir de ahí lo típico en este tipo de partidos: entradas duras, ocasiones falladas, sustos y tanganas. Lo importante eran los 3 puntos y esos son nuestros.
DETALLES:
- Queda demostrado que a Míchel Salgado le queda mucha gasolina y que es 20 millones de veces mejor jugador que Sergio Ramos.
- No me gusta que Pepe finja agresiones inexistentes.
- Robben es, digan lo que digan, el jugador más en forma del mundo en estos momentos.
- Estamos empezando a "jugar bien" (crear muchas ocasiones) y eso no me gusta. A mí me gusta llegar dos veces y meter dos goles y luego que critique la gente.
- Maravilloso cántico el que se escuchó en el Bernabéu: "De Juana muérete".
- Otra vez Higuaín creciendo. Otra vez.
- Es importante estar a un punto del liderato aunque, como ya dije en otro post, esta liga es prácticamente imposible ganarla por haber perdido en la primera jornada. Se lleva cumpliendo la tradición demasiados años como para romperla pero...¡CONFIEMOS!
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